martes, enero 17, 2006

¿La velocidad mata? ¿Alcohol+bebida=muerte?

¿Cuántas veces hemos oído en informativos y periódicos eso de la velocidad mata? Y, ¿cuántas veces hemos superado muy poquito los 120km/h y algún familiar ha dicho eso de no corras tanto?

La sociedad, que debería ser cada vez más libre, se está volviendo cada vez más histérica con una serie de mitos que nos crean los medios de comunicación. La velocidad no mata, matan los asesinos, los que se distraen al volante, los suicidas y los imprudentes (entre otros), pero la velocidad en si no mata.

Según los noticiarios, en el 50% de los accidentes, alguno de los vehículos había excedido la velocidad máxima para la vía. Muy bien, de ahí teóricamente se desprende (si no se dice nada más), que la velocidad es directamente responsable. Pero después uno se va a los datos de tráfico y aparece que, de media, la mitad de los vehículos rebasan la velocidad máxima de la vía. Por lo tanto, la velocidad no tiene nada que ver con los accidentes.

Si a las causas de un accidente de alguien que iba a 130km/h simplemente le ponemos "exceso de velocidad", no estamos diciendo la causa real. Pudo ser un despiste, pudo desmayarse, pudo dormirse... pero se deja todo en exceso de velocidad. Pero, ¿por qué cebarse tanto con el exceso de velocidad y el alcohol en carretera? Pues porque son las únicas variables que se pueden medir realmente.

Todos tenemos algún amigo que bebe cuando conduce. Todos tenemos algún amigo que corre muchísimo y, casualmente, nunca han tenido un accidente por estas causas (ooohhh). Sin embargo, tenemos una amiga (o amigo) muy responsable que conduce fatal, es insegura y ha tenido ya más de un golpe. ¿Cuál es el auténtico peligro en carretera?

Lo que ocurre es que a los malos conductores (esos que se paran en los cruces cuando tienen preferencia, que van con miedo, que no tienen ni idea de adelantar en carretera...) son muy difíciles de medir y la policía no se pilla los dedos para denunciar que aminoró cuando tenía prioridad o que adelantó mal; sin embargo, el test de alcoholemia es una prueba y el radar también.

Es cierto que la bebida merma los sentidos y que cuanta mayor sea la velocidad, menos tiempo tenemos para tomar decisiones. Sin embargo, no por ello debemos taparnos los ojos. Si a mí me tienen que llevar, prefiero que lo haga un buen conductor con dos cervezas y a 140km/h (aunque sea merecedor de cárcel según esa porquería de leyes) que una conductora (o conductor) mala e insegura que vaya por autovía a 80km/h (algo tan legal como peligroso) sin ninguna cerveza.

En el fondo, ¿qué es esa propaganda contra el alcohol en carretera y contra la velocidad excesiva? Bombas de humo para que pensemos dos cosas:
1) La culpa de los accidentes es de aquellas personas que beben o sobrepasan la velocidad
2) El estado, mediante las campañas para que la gente se modere, está haciendo algo por los ciudadanos.
Pero en realidad, el Estado está haciendo mucho dinero en multas y no está haciendo nada real para evitar los accidentes.



Si se quisiera que los accidentes disminuyeran:

-¿Por qué no mejorar aquellos puntos negros en los que ha habido un accidente mortal tras otro? Aunque de esto no hablen nunca en la tele, los hay por toda España y no son arreglados. ¿Por qué? Porque económicamente no interesa tal desembolso por unas cuantas vidas :-o Si interesara económicamente, no cabe duda que habrían sido cambiados. Bastante triste.

-¿Por qué no se enseña a conducir en las autoescuelas? Porque enseñar a aprobar en el examen no es aprender a conducir. ¿Quién practicó el adelantamiento en carretera en la autoescuela? Nadie. Y eso es más peligroso para la salud (posible choque frontal contra un coche que viene en el otro sentido) que hacer la rampa.

Si se quisiera que los accidentes disminuyeran, disminuirían. Pero es más fácil poner parches que volver a coser un vestido.